martes, 24 de enero de 2012

Crees que el dinero es tu sustento


Necesitamos el dinero para suministrarnos todo lo necesario para vivir, alimento, abrigo, un techo y cuidar nuestra salud.  Además el dinero nos da acceso a todo lo necesario para nuestras comodidades y para disfrutar de la vida. El dinero lo hemos inventado para poder hacer transacciones entre nosotros de tal manera de que sean claras y deje conforme a las partes involucradas. De momento es el mejor medio que hemos encontrado para hacer estas transacciones de productos y servicios y aunque en un futuro  pudiera cambiar, en estos momentos tenemos la necesidad de aprender a utilizarlo para movernos sin inconvenientes.

Si necesitamos el dinero para vivir y vivir bien, no es extraño que todos nos pongamos de cabeza a pensar qué hacer para obtenerlo y cómo hacer para obtener el máximo posible y asegurarnos de que nunca nos falte. Quisiéramos obtener lo más pronto posible una buena cantidad, suficiente para  nunca sentimos desprotegidos y en riesgo, y tener la certeza de que nuestra existencia terrenal  estará  asegurada para disfrutar tranquilamente de una vida plena.

En realidad nosotros no hemos venido a esta tierra a preocuparnos de donde obtener dinero para vivir, hemos venido a vivir para disfrutar y experimentar diferentes situaciones y entre eso se encuentra la creación de dinero.  Cuando invertimos el sentido, obtenernos una gran cantidad de efectos secundarios, ya que tenemos la tendencia a postergar nuestro ser a cambio de la ocupación de crear dinero.

Cuando nuestros hijos inician sus estudios formales, ya estamos diseñando las estrategias para que puedan elegir la profesión mejor remunerada y tener la certeza de que no tendrán ningún inconveniente económico para vivir su vida.  No obstante, olvidamos que ellos tienen sus propios dones y que la expresión de su propio ser les dará una dicha alcanzable solo por medio del despliegue de su personal y valiosa manera de colaborar al crecimiento de la humanidad y que el dinero llegará a ellos después de haber destacado en su propio valor. Hacemos que se olviden de ellos mismos.

Cuando nos olvidamos de nosotros mismos, nuestro ser comienza a marchitarse, se deprime, se posterga, se ahoga, se limita y en definitiva podemos decir que comienza a morir. Nos preocupamos más de lo que le vamos a dar a nuestro cuerpo físico, que de lo que vamos a dar a nuestro espíritu. Nuestro cuerpo necesita cuidados, sin lugar a dudas, pero es nuestro espíritu el encargado de cuidarlo y de crear las condiciones para que se mantenga saludable, vital y seguro. Cuando descuidamos nuestro espíritu, el cuerpo físico comienza a enfermar sin remedio.

No confiamos en las capacidades de nuestro espíritu, no comprendemos la importancia de alimentarlo, no comprendemos que nuestro cuerpo está bajo el dominio de nuestra alma y nuestra alma bajo el dominio de nuestro espíritu. ¿Quién puede cuidar mejor a nuestro cuerpo que aquellas partes más elevadas de nosotros mismos?

El dinero no puede ser el sustento de nuestra vida, nuestro espíritu es el sustento verdadero, el que nos dirá qué hacer, dónde ir y cuándo, el que nos puede guiar para obtener mucho dinero. Escuchando a nuestro ser interior nos sentiremos acompañados, protegidos y haremos milagros allí donde no existe nada. No importará si tenemos estudios, si tenemos recursos económicos, si tenemos tal o cual cosa. Con su ayuda podremos hacer grandes acciones que pueden elevar nuestra vida a niveles que ni siquiera sospechamos mientras andamos a ciegas en busca del dinero para vivir tranquilos.

Si nuestro ser está medio muerto, por más dinero que tengamos, no podremos ser felices. Sin embrago, si nuestro espíritu está vibrante crearemos riqueza allí donde nunca hubo nada, allí donde todo está seco, aun allí podremos hacer milagros. Bajo su guía jamás seremos presas del miedo, el miedo es solo una apreciación negativa de la realidad que nos hace ver las carencias en vez de las oportunidades, la fealdad en vez de la belleza de construir cuanto nos sea posible hacer.

Tu dinero proveniente de una fuente terrenal que cuidas como si fuera tu vida no es nada comparado con la vida que tienes dentro de tu ser.  La permanente preocupación de crear dinero nos hace ciegos a la realidad maravillosa de todo lo que existe. Vemos escasez de alimentos cuando a ningún árbol se le ha olvidado dar frutos y a la tierra germinar las semillas. Se nos olvida lo que nos gusta hacer, se nos olvida pararnos con la frente en alto y decir aquí estoy, dispuesto a hacer lo que mi alma dice que haga para tener la abundancia de todo lo bueno de la vida, no tan solo de dinero,  sino de paz interior y amor a sí mismos.

Se nos olvida que hemos recibido el maravilloso don de abrir la realidad, de diseñar la realidad, de elegir de entre las miles de posibilidades que existen al mismo tiempo la que más nos guste y la más útil para crear nuestra realidad física.  Se nos olvida considerar la parte de nosotros que nos puede ayudar a lograrlo y la dejamos en un rincón abandonada como si fuera una parte inútil que nos quitará tiempo en vez de darnos utilidades.

Patricia González
Tu coach para realizar los cambios que deseas.

Si deseas recibir nuevas publicaciones sobre temas abundancia, registra tu e-mail en la parte superior derecha del blog: http://abundanciayovivo.blogspot.com


Visita nuestra página web www.yovivo.cl

2 comentarios:

  1. Es muy cierto que se me olvida que puede elegir lo que quiero en mi vida, pero a veces con tanta presion alrededor, eso... se me olvida.
    Gracias a personas como TU que nos haces recordar el maravilloso poder que se nos ha dado de manera gratuita.

    ResponderEliminar
  2. Me encanta saber que podemos recordar quienes somos y todos los regalos que existen para cada uno. Es maravilloso poder recordar eso. Gracias por escribir. Patricia

    ResponderEliminar